La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) llamó a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de Hidalgo (STPSH) a intervenir como mediador en el conflicto entre un grupo de trabajadores que emplazaron a huelga y acusan irregularidades y el restaurante El Molino, para que no existan “lapsos largos de burocracia”.
A 11 días de paro laboral, Álvaro Gutiérrez Barranco, dueño de El Molino, dijo que han tenido varios acercamientos con la STPSH, la juez del Tribunal Laboral que lleva el caso y la Junta de Conciliación.
Afirmó que los trabajados en paro, que exigen pago de seguro social, respeto de sus garantías, no cobro de uniformes, respeto de horarios, pago de horas extra, freno al acoso laboral, trato digno y comida no echada a perder, entre otras, son diez, mientras un grupo mayoritario de 29 desea trabajar, dijo.
El empresario aseveró que la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), ente al que se sindicalizó el grupo en huelga, busca firmar un contrato colectivo de trabajo, pero insistió en que “la mayoría no quiere”.
Ante ese escenario, dijo la autoridad laboral debe hacer un recuento de quiénes quieren y quiénes no al sindicato; sin embargo, sostuvo que “por formulismo y burocracia” el proceso no avanza y ha “tardado mucho”.
Afirmó que el tribunal laboral le dijo que había que esperar “los tiempos de la ley”, pues primero deben registrar a los testigos de quienes harán el conteo, a cargo de la autoridad. Añadió que las mediaciones ya fue agotaron.
El empresario sostuvo que el sindicato lo emplazó a huelga con una minoría y que tiene “secuestrado el negocio”, lo que afecta los ingresos de los trabajadores y el patrón.
No te puedo firmar un contrato colectivo porque el gran colectivo, que está de este lado, no quiere”, expuso tras afirmar que el sindicato propuso en su pliego petitorio salarios más bajos de los que actualmente paga.
Por el momento, la empresa está pagando medios sueldos a los 29 trabajados que están en contra del paro, y sostuvo que reporta pérdidas promedio de 20 mil pesos diarios (más de 200 mil pesos en lo que llega la huelga).
El administrador general de El Molino reconoció que le piden a sus trabajadores que adquieran un uniforme y él les da dos, además de que no todos sus trabajadores cuenta con seguro social, solo 25, por “economía” y falta de papeles.
Tras el paro, Gutiérrez Barranco afirmó estar dispuesto a escuchar las quejas y anomalías que acusan los empleados en el trato que reciben, pero aseveró que el sindicato lo impide.
Yo como empresario no soy perfecto, y si tengo errores, los tengo que corregir, eso estoy de acuerdo, pero el sindicato esta impidiendo que trabajen”, afirmó.
Sobre los señalamientos de acoso sexual, dijo que los sindicatos los usan para “lastimar el prestigio de las personas”.
Señaló que ahora deberá cumplir con todas las reglas y lo que marca la ley laborar. Asimismo, dijo que acordado con el grupo de 29 el pago de horas extra.
El presidente de la Canirac llamó al representante de El Molino y a otros empresarios restauranteros dar a sus empleados “lo que marca la ley.
TRABAJADORES, LOS AFECTADOS
Trabajadores del grupo de los 29 que no están a favor del sindicato dijeron que no fueron consultados si querían ser afiliados al ente gremial ni hubo asamblea para determinar si estaban a favor de la huelga.
Agregaron que el patrón tiene su defensa legal y el grupo minoritario el respaldo de la CROC, pero a ellos están en indefensión legal.
“A los que no (buscan ser sindicalizados), quién nos está defendiendo, estamos siendo atropellados laboralmente, tenemos familia, tenemos hijos.
Los empleados rechazaron estar amenazados por el empresario, como acusó el sindicato, al que se adhirieron sus compañeros, y pidieron que el retiro de la huelga para poder laborar.
Dijeron que estarían a favo de formar un sindicato entre los propios trabajadores de El Molino, no uno externo como la CROC.
No nos pueden coaccionar a tener que aceptar un contrato colectivo laboral, puesto que no nos conviene”, expreso otro trabajador.
DatoAcro
El Molino negó que se den alimentos echados a perder, pues dijo que los perecederos los adquieren diariamente.
El empresario señaló que actualmente los salarios que ofrece va de los 218 hasta 400 pesos diarios.
Editor general, reportero