El gobernador Julio Menchaca Salazar consideró que la petición del presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cardenas, para que los regidores y alcaldes tricolores voten en contra de la reforma electoral que empatará las elecciones en Hidalgo a partir de 2030, se debe a “cuestiones electoreras”.
La reforma constitucional, avalada en diciembre pasado por mayoría del Congreso local, regresa a los periodos de tres años de gobierno en las alcaldías a partir de 2024, con derecho a la reelección por un periodo, y mandata una gubernatura de dos años en 2028, para que a partir de 2030 todos los procesos comiciales en la entidad estén empatados juntos a los federales.
Sostuvo que en Hidalgo hay “una muy buena relación” del gobierno estatal con los municipales, pues no solo son los alcaldes, son los ayuntamientos. Asimismo, indicó, con los representantes de partido en el Legislativo.
Aseveró que, de acuerdo con la información con que cuenta, “ya se tenía el número superior a los 43 (municipios) que exige la reforma constitucional” para ser válida.
Sin embargo, según Servicios Legislativos del Congreso local, hasta el momento solo 28 cabildos, entre ellos de extracción priista, ha avalado al reforma propuesta por Menchaca Salazar.
El morenista aseveró que no entraría en una “situación de debate” con el dirigente nacional del PRI.
DICE PRI QUE ES REGRESIVA
Según el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, la reforma electoral es “regresiva y que atenta contra los derechos de las personas, la estabilidad política y social de la entidad”.
La dirigencia nacional del PRI sostuvo que esta disposición fue pensada por Morena para violar “los derechos de las mujeres”, ya que los partidos políticos -aseveró- deberán postular féminas para el siguiente periodo y, en este caso, será de dos años.
Editor general, reportero