El Congreso local aprobó que las mujeres servidoras públicas de la entidad tengan derecho a una licencia menstrual de dos días al mes para ausentarse de su centro de trabajo con permiso y goce de sueldo.
Durante la sesión de este miércoles, fue aprobada una reforma a la Ley de Trabajadores al Servicio de los Gobiernos Estatales y Municipales, así como de los Organismos Descentralizados de Hidalgo, la cual establece que las mujeres y personas menstruantes trabajadoras, a quienes se les haya diagnosticado con dismenorrea primaria o secundaria en grado incapacitante, dispondrán de un permiso con goce de sueldo para ausentarse de su centro de trabajo por dos días cada mes.
Para justificar su ausencia, deberán presentar en el área correspondiente de su centro laboral el certificado médico que lo acredite, emitido por un especialista en ginecología de alguna institución de salud pública. Este, tendrá una vigencia de seis meses a partir de su expedición y deberá renovarse para confirmar el diagnóstico.
Durante la lectura del dictamen, el diputado Osiris Leines Medécigo refirió que la licencia menstrual surgió de una petición de un grupo de mujeres jóvenes.
Asimismo, dijo que en países como Japón se reconoció este derecho de las mujeres trabajadoras en 1947 y señaló que la Cámara de Diputados federal recientemente aprobó esta licencia para incorporarla a la Ley Federal de Trabajo.
Leines Medécigo explicó que la dismenorrea es el dolor relacionado con la hemorragia menstrual, que a su vez está relacionado con las dolencias causadas por enfermedades pélvicas como la endometriosis, quistes de ovarios, adherencias, entre otras.
Por lo que dijo que este padecimiento dificulta el desempeño de las actividades diarias normales, ya que el dolor en la parte inferior del abdomen, espalda y piernas, dijo, puede ser incapacitante. Además, señaló que estos son acompañados por otros síntomas como náuseas y vómitos, fatiga, nerviosismo y dolor de cabeza severa.
No solo tenemos la oportunidad de acabar con el tabú social que engloba la menstruación, sino también el garantizar los derechos sexuales y laborales de las mujeres y personas menstruantes. El votar a favor del dictamen representa el pago de la deuda histórica con las mujeres trabajadoras (…) Es la consagración de una parte de la lucha constante y permanente de las mujeres, es el reconocimiento de sus derechos”, mencionó.