Después de décadas de actuar en una atracción turística en Miami, la orca conocida como Lolita parece estar a un paso de regresar a su hábitat natural en el noroeste del Pacífico. El animal fue sacado del océano en 1970 y ha sido objeto de una larga disputa sobre a dónde pertenece.
Sin embargo, este jueves, funcionarios de varios partidos en Estados Unidos anunciaron un “acuerdo vinculante” para llevar a Lolita, también conocida como Tokitae o Toki, a sus “aguas natales”. En el comunicado emitido por el Miami Seaquarium, Lolita recibirá la atención de la más alta calidad mientras el equipo trabaja para hacer posible su reubicación en los próximos 18 a 24 meses.
Jim Irsay, el dueño de los Indianapolis Colts, está ayudando a pagar la mudanza de Lolita y ha expresado su determinación en ayudar a la ballena a ser liberada. Según dijo el dueño de los Colts, el costo de la mudanza podría llegar a “ocho cifras”.
Este acuerdo ha sido recibido con gran entusiasmo por los defensores de los derechos de los animales, que han estado presionando durante años para que se permita a Lolita regresar a su hábitat natural.